D. ANTONIO, EL ANTIGUO PARROCO, DEJO UNA HERENCIA PARA LA REHABILITACION DEL CONVENTO Y LA TORRE DE LA IGLESIA
Acabamos de celebrar un pleno extraordinario en el que, además de otros puntos, se ha aceptado por unanimidad de la corporación, la herencia de Don Antonio Hernández Ovejero, antiguo párroco de Ajo.
Don Antonio dejo en su testamento una herencia al pueblo de mas de 240.000 €, condicionados a destinarse a las obras de reparación y restauración del Convento de San Ildefonso y de la torre de la Iglesia de San Martín, ambas actuaciones muy demandadas por el deterioro que presentan.
Con esta aportación, D. Antonio quiso tener un último gesto con el pueblo y la parroquia donde desarrollo su labor pastoral los últimos 40 años y que nos permitirá acometer esas obras en dos edificios tan emblemáticos, algo por lo que siempre le estaremos agradecidos.